Pamplona multa con 12.000 euros a diez personas por las agresiones a concejales y policías en la procesión de San Fermín.

eldiario.es.- El Ayuntamiento de la capital navarra ha interpuesto diez denuncias por vía administrativa por los incidentes en la calle Curía del 7 de julio por los que fueron detenidas ocho personas.

El Ayuntamiento de Pamplona ha interpuesto diez denuncias por vía administrativa por valor de 12.000 por los incidentes ocurridos el pasado 7 de julio durante la procesión de San Fermín en la que varios policías resultaron heridos mientras custodiaban a la corporación municipal durante el paso de la procesión por la calle Curia.

Según ha informado el Consistorio, se sanciona a diez personas por “su participación activa en la perturbación de la seguridad ciudadana en el marco del desarrollo de la procesión de San Fermín, increpando y acosando a parte de los participantes en la misma”, arrojándoles bebida y “creando una situación de tensión y violencia”. Para cada una de estas personas se reclama una sanción económica de 12.000 euros.

En las diferentes resoluciones dictadas por el área de Seguridad Ciudadana, se considera que los hechos ocurridos en la calle Curia el 7 de julio durante la procesión pueden constituir una infracción grave tipificada en la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana. El motivo de las denuncias y de las posibles sanciones tiene que ver con unos hechos que, según se describe, “se produjeron con violencia, amenaza o intimidación, y dada la entidad del riesgo producido para la seguridad ciudadana y a la trascendencia del perjuicio para el mantenimiento y restablecimiento de la seguridad ciudadana, la cuantía de la sanción que se propone es de 12.000 euros”.

El Ayuntamiento apunta además que, junto a esta vía administrativa, sigue abierta la vía judicial, en la que el Consistorio ha firmado ya personarse como acusación particular en el procedimiento que se lleve a cabo para juzgar lo sucedido como perjudicado en los sucesos ocurridos. En las jornadas posteriores a los altercados, la Policía Municipal detuvo a ocho personas por su participación en las agresiones. Para uno de ellos, el presunto autor del puñetazo que le rompió la nariz a uno de los agentes, la jueza decretó su ingreso en prisión sin fianza además de imputarle un presunto delito de desórdenes públicos, atentado a la autoridad, delito de odio y lesiones.

El suceso se produjo durante el retorno de la procesión en el que la corporación municipal acompaña al Cabildo catedralicio hasta la Catedral de Pamplona. A su paso por la calle Curia varias personas gritaron ‘UPN kanpora’ (‘Fuera UPN’) y abuchearon a la corporación municipal a su paso por esta calle. Además, lanzaron algún objeto al alcalde de Pamplona, Enrique Maya.