Los graves insultos racistas que sufrió Mayra ante el Alhama.

As.- En el acta, la colegiada Sánchez Miguel asegura que desde la grada gritaron a la colombiana “¡Mono Parrales, comes con las manos o qué, animal!”.

Los octavos de final de la Copa de la Reina está siendo muy convulsos. A las posibles alineaciones indebidas de Sevilla y Barcelona, el miércoles se vivió uno de esos episodios negros del fútbol. El Alhama-Levante que se vio salpicado por unos supuestos insultos racistas propinados desde la grada del José Kubala a futbolistas del Levante. Y el acta del partido confirma que hubo dichos insultos hacía la jugadora colombiana Mayra Ramírez.

El partido entre azulonas y granotas vio interrumpido durante la recta final de los primeros 90 minutos. Tras reiniciarse el juego e irse el choque a la prórroga, con el 3-3, dos agentes de la Guardia Civil han estado hablando sobre lo sucedido con el equipo arbitral, encabezado por la colegiada Sánchez Miguel. La árbitra dejó constancia de los sucedido en el acta arbitral al que AS ha tenido acceso.

“En el minuto 85 de partido nos vemos obligadas a detener momentáneamente el encuentro debido a los incidentes descritos a continuación. Estando el balón en juego desde la zona de público situada en la banda de la árbitra asistente nº2 frente a la asistente nº1 varios aficionados identificados como seguidores del Alhama CF por las bufandas y camisetas que portaban, con emblemas y logo de dicho club, se han dirigido a la jugadora visitante número 7 Mayra Ramírez en los siguientes términos: “¡Mono Parrales, comes con las manos o qué, animal!”. Dichos comentarios han sido escuchados por mi misma y la jugadora afectadaa, que también se dirige a mi para comunicarme dichas incidencias”, explica en el acta. Además, asegura que se personó la Guardia Civil ya que la megafonía, por donde se avisa al público de este tipo de comportamientos, tenía el volumen muy bajo.

El partido estuvo detenido tres minutos y, según el acta, no se volvieron a escuchar insultos racistas. Sin embargo, también hace constar el lanzamiento de un balón que interfiere en el juego durante una jugada de ataque del equipo visitante, un Levante que buscaba la igualada para no verse apeado de la Copa de la Reina. Un acto que vuelve a suceder antes del final, aunque en esta ocasión sin interferir en el juego.